ritmo y medios audiovisuales, música y cinematografía |
||||||
conceptos |
Ritmo: relación armoniosa entre los distintos elementos de una forma que se establece y fluye en el espacio y en el tiempo. Contiene alternancias, reiteraciones y regularidades entre duraciones e intensidades que se articulan sobre determinados pulsos o puntos de referencia.
Podemos aplicar ese concepto a muy diferentes aspectos de la realidad, tanto en las manifestaciones naturales y espontáneas del mundo físico como en el campo de los lenguajes, de la expresión artística, y de otras acciones humanas. Nuestra propia configuración física y psicológica contiene claves y estructuras rítmicas: la respiración, las simetrías del cuerpo, el latido del corazón, nuestro modo de caminar, la sucesión de días y noches con sus actividades vitales específicas, las ondas cerebrales, y otros biorritmos y ciclos de la naturaleza. "Un individuo considerado según la suma de sus cualidades y de su devenir corresponde a una armonía de ritmos temporales". El ritmo surge del comportamiento de la energía, de la propia estructura de la materia, pero cobra vida y sentido en el psiquismo atávico de los sujetos. Es la danza de la vida. Posee una enorme capacidad para captar y sostener la atención y para provocar respuestas y reacciones en muy diferentes niveles de conciencia. Desde el agrado o el baile hasta estados hipnóticos o de éxtasis inducidos por el fluido rítmico de las percepciones.
La arquitectura que planifica la construcción de composiciones musicales se basa, en primera instancia, en el flujo lógico, o lógica fluida, del compás: a partir de la reiteración medida de alternancias entre partes débiles y partes fuertes, en las que el pulso métrico se carga con diferentes pesos o intensidades, se generan unas expectativas que se han de cumplir en el tiempo de forma más o menos precisa como acentos, puntos de apoyo. Son los primeros cimientos del ritmo, la incitación fundamental para todo tipo de danza. |
conceptos |
||||
No todos los ritmos son estrictamente métricos, aunque todos comparten la alternancia entre 'arsis' y 'tesis', entre partes débiles y partes fuertes, como ocurre con el oleaje. Y, si esto es así, no podemos obviar el ritmo que contienen todos los discursos físicos, |
||||||